viernes, 7 de marzo de 2025

Los sueños proféticos

¿Qué pasa con los sueños en la biblia? Aquello se diría que es casi un correo electrónico, sólo sorprende no recibir spam.

¿Será Elon Musk un dios acaso si logra hacer funcionar Neuralink?

Nunca hay que perder de vista las palabras de Arthur C Clarke, repetidas hasta la saciedad y aún así siguen sin estar de más:

Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia.

Se podría poner al lado de las leyes de Newton.

Y de hecho algunas de las habilidades que se hallan en la diversidad del reino animal, también podrían serlo.

Si uno piensa que no, vale la pena rememorar el camuflaje de los pulpos, la electricidad de las anguilas, incluso hay un camarón que traspasa la barrera del sonido con un mecanismo de resorte en el brazo para romper las conchas de los crustáceos.

O más sencillo, el vuelo de las aves. Tal vez la comparación resulta válida porque hablamos también de tecnología. Biológica, en este segundo caso. Tampoco es nada nuevo en realidad, todo lo contrario. Antes del vapor el trabajo duro era para los animales. Tracción animal, a sangre, que se solía decir.

Sucede que el camino que uno toma, sin ninguna otra referencia, parece el único camino lógico. Pero siempre es en función de un contexto determinado. En otro posible contexto el camino más lógico bien podría ser otro. Y en función del grado de conocimiento las soluciones a una misma situación difieren mucho. En una palabra, tecnología.

Y es curioso porque el ser humano, que algo innato tiene de explorador, ha escalado montañas, ha atravesado mares, ha parcelado hasta el último rincón de la tierra, se diría que ha contado las estrellas, o las está contando… y no ha explorado tanto hacia dentro, tal vez la última frontera hoy sea la de los propios sueños. En lo literal, sin artificio poético.

Algo hemos aprendido del cerebro, sabemos que funciona con impulsos eléctricos, que emite en una cierta frecuencia. Emite, ¿pero no recibe?. Más que nada porque en electrónica, los procesos físicos suelen ser bidireccionales, desde un transformador a través de la inducción hasta un cristal piezoeléctrico. Y la antena con la que se emite es la misma que con la que se recibe.

Al fenómeno por el cual muchas veces nos sentimos observados y, al girarnos vemos que efectivamente alguien nos mira, se le ha llamado escopaestesia. Casi nada. ¿Tal vez un sesgo de apreciación o quizás podría haber algún fenómeno físico subyacente?

¿Es posible que nos haya quedado un terreno por explorar, no por distante e inaccesible, si no por tan cercano que no somos capaces de verlo?

Todas las cosas que sabemos se diría que corresponden a la vigilia, y sin embargo una tercera parte del tiempo la pasamos durmiendo. Y de los sueños, no es que sepamos muchas cosas.

En parte porque la conciencia no está ahí. Pero a veces, algo trae de vuelta. No deja de ser curioso.

Y, siendo en la antiguas escrituras casi una constante, es también curioso que no nos hallamos interrogado más sobre ello desde el punto de vista puramente técnico.

Qué duda cabe, hay buenos motivos para ello. En una sociedad como la presente, si pudieran te meterían publicidad hasta en sueños. ¿Te imaginas?

https://youtu.be/3qTqT8wo5zU?si=HVA6R9j0SuRZukD_

 

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